Este viernes termina la audiencia pública a cargo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la demanda que iniciaron la agrupación Memoria Activa junto al Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) en 1999 en el que denuncian “la responsabilidad del Estado argentino por el atentado a la sede de la AMIA y la falta de esclarecimiento, de verdad y de justicia” del ataque terrorista en el que murieron 85 personas.
Las audiencias tuvieron como sede a la ciudad de Montevideo, Uruguay. La primera jornada fue ayer y este viernes continuaba con la participación de peritos de parte de las agrupaciones demandantes. Se trata de la última instancia antes de que la CIDH de a conocer su veredicto.
Durante su intervención, Adriana Reisfeld, de Memoria Activa, valoró la presencia de funcionarios del Estado nacional, “pero no es lo que esperábamos”, resaltó. “No hay ningún funcionario del Ministerio de Justicia. No está el ministro, ni el vice, nadie. Este es el juicio más grande que tiene la causa Amia contra el Estado argentino y sin embargo no están acá. Mandan funcionarios que yo lo veo bien, amorosamente no los desmerezco, pero no es lo que esperábamos”, señaló.
Para Reisfeld, “la Causa Amia se merecía que hoy esté el ministro o el vice”. Sin embargo, “siempre hay algo más importante que la Causa Amia en Argentina”.
Además, la integrante de la agrupación de familiares de víctimas del atentado respondió las preguntas del presidente de la CIDH, Ricardo Pérez Manrique.
“¿Usted entiende que hay elementos discriminatorios hacia las víctimas, tanto en el proceso de investigación como en el trato que se les dispensa?”, preguntó el titular del organismo internacional.
“Si, que el Estado argentino no me haga ninguna pregunta es discriminatorio y me ofende. Hay tanto para que ellos pregunten, son los que tendrían que tener no 20 minutos, no les alcanzaría con horas. Es una vergüenza que no nos pregunten, pero no tienen vergüenza. El Estado argentino, lamentablemente, en la causa Amia se ha portado horrible”, respondió Reisfeld, y agregó que el objetivo de Memoria Activa es la búsqueda de verdad y justicia en la Causa. “No tenemos ningún otro objetivo”.
Consultada si como organización alguna relación con el Estado en función del objetivo de la asociación, aseguró que “en este momento no”.
“Hemos tenido en los primeros tiempos de la Cancillería. Cuando fue el Decreto 812, la Comisión había instado a que tengamos reuniones periódicas cada dos o tres meses, y las teníamos. Con algún fiscalía tuvimos alguna relación, pero en este momento no hay ninguna relación. Ninguna significa en absoluto. Ni con la presidencia, ni con los ministros ni con nadie”, añadió.
También le consultaron que opinión tiene de la UFI AMIA, una unidad creada especialmente para investigar el caso. “La UFI AMIA no funciona. Es así. Tendría que representarnos. Lo vivimos en el último juicio por encubrimiento, que no acusaron ni a los fiscales ni jueces. No podemos entender con todo lo que quedó demostrado que los fiscales y el juez tenían que ver con el encubrimiento de la Causa Amia ellos se hayan abstenido”.
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