Trabajadora denunció a dueños de un geriátrico por graves hechos de violencia

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Los dueños de una casa de asilo para personas adultas mayores fueron denunciados por una ex trabajadora de violencia de género, tratos inhumanos, amenazas y privación ilegítima de la libertad.

La mujer acusó a Aidé Alcatraz y Roberto Castro Villari, dueños del geriátrico a nombre de la empresa Cocurt SAS, en la policía de la localidad cordobesa. En diálogo con Una radio, muchas voces, manifestó: “Esa gente es una mafia. Yo no quise ser más partícipe de esta negligencia y no me presenté más al trabajo. Cuando volví a buscar mis cosas me maltrataron, me encerraron en contra de mi voluntad. Alcatraz ordenó a la enfermera Soledad que me encerrara con llave dentro de la residencia, llamó a Roberto Castro Villari. Tengo pruebas”.

“En otra oportunidad me dijo que era una ‘planera’, una ‘negra de mierda’. Que si seguía rompiendo las pelotas me iba a cagar a trompadas. Lo dijo también en una reunión donde estábamos todas”, relató.

Y continuó: “En esa ocasión le respondí que se fije cómo me habla porque están las cámaras. Me dijo: Las cámaras son mías, edito, borro y si quiero las apago. Es más, si te querés ir ahora, ¡tomatela! Y ni se te ocurra hablar. Yo soy del poder, muevo cosas en Puerto Iguazú. ¿qué te pensás, que soy un pobre diablo como vos?.

Además denunció que uno de los residentes falleció “por falta de un tubo de oxígeno”, que otra paciente sangraba sin ser atendida, y que otras trabajadoras también fueron amenazadas.

Lo que más triste me pone de todo esto no es que me hayan violentado, es la situación que viven esos abuelos. Cuando reciben visitas, es un festín, pero cuando se van ellos pasan un infierno”, concluyó.

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